En las clases de inglés semanales para niños, conseguimos un nuevo método de aprender inglés, donde se mezcla la parte artística con la enseñanza del idioma.

El método Zentangle es una técnica fácil de aprender que mejora la autoestima de los niños, consiguiendo que la atención y concentración puesta en los trazos, haga que la mente se relaje y facilite al niño el aprendizaje del inglés.

Este estado de paz y sosiego ayuda a los niños de una manera relajada, a absorber y asimilar el inglés.

El hecho de poder crear algo bonito y artístico llena de satisfacción al alumnado y eso le hace sentir bien potenciando el aprendizaje.

La experiencia les hace sentir empoderados puesto que no sólo consiguieron hacer algo que se creían incapaces de hacer, sino también disfrutaron de la experiencia.

A lo largo de la clase se va obteniendo un estado de alerta, donde van disminuyendo los pensamientos favoreciendo el entendimiento del inglés.